Devorador de Mangas: Blue Period #1

¡Buenas tardes, minna!

Cuando Milwy Way anunció este tomo, primero pensé que era Yaoi. El dibujo me gustaba mucho y seguí investigando. Aunque después vi que no era un Yaoi, seguí interesado, porque me tocaba un poco la fibra sensible. ¡Ahora os cuento más!

Título: Blue Period

Saga: Blue Period #1

Guión: Tsubasa Yamaguchi

Traducción: Jesús Espí

Dibujo: Tsubasa Yamaguchi

Editorial: Milky Way Ediciones

Género: Slice of Life / Seinen

Páginas: 224

ISBN: 978-84-17820-61-9

Precio: 8,50 €

Es un estudiante de bachillerato espabilado, popular, que saca muy buenas notas y tiene ideas pragmáticas sobre su futuro. También bebe, fuma y sale de juerga por las noches. Y un día, de repente, descubre el gozo de dibujar.

¡Esta es la historia de superación de Yatora Yaguchi, repleta de vicisitudes en su camino para aprobar el examen de ingreso a una universidad de arte, en una versión de la tenacidad deportiva aplicada a las bellas artes!

De acuerdo, comenzamos con la historia. Yatora Yaguchi es un chico popular, famoso por sus aires de macarra y sus buenas notas. Aunque no tiene problemas para compaginar la fiesta y los estudios, no termina de encontrar qué le llena y las pruebas de acceso a la universidad se acercan.

Un día, en clase de Arte, descubre el cuadro de una compañera y se queda asombrado. Aunque el chico no entiende de técnica, es capaz de comprender la combinación de colores y el mensaje que quería transmitir la chica. Cuando una mañana, de camino a casa tras salir, ve la ciudad calmada y vacía, decide ponerse manos a la obra.

Pese al miedo a que su afición por la pintura no sirva como forma de vida, Yatora decide arriesgarse y apuntarse al club de Arte, donde deberá aprender y mejorar si quiere acceder a una de las prestigiosas universidades de Bellas Artes. Tiene dos años para ello, pero el camino que se plantea ante él implica dedicación y una fuerte voluntad.

Y esa es más o menos la historia. Yatora es un chico conocido por ser un gamberro con buenas notas. Tiene el pelo teñido, lleva piercings, fuma, bebe... y aun así saca tiempo para estudiar y sacar unas calificaciones bastante buenas. Sin embargo, todo se lo toma como una competición que nunca llega a llenarle por dentro.

Un día, en clase de Arte, encuentra un dibujo al óleo que ha dibujado Mori, una alumna de tercero. Aunque la chica es tímida y piensa que Yatora se va a burlar de ella, el chico comienza a preguntarle sobre la combinación de colores que ha elegido y confiesa entender en cierta manera el mensaje que quiere reflejar Mori en su dibujo.

Esto no pasa desapercibido para los amigos de Yatora ni para Yuka, otra alumna del club de Arte, que lleva engañado al chico para que vea cómo trabajan allí. La profesora, además, pronto ve el talento que tiene el chico para pintar, incluso sin la base teórica necesaria. Aun así, sus dibujos todavía son de novato.

De todos modos, Yatora no se rinde. Cuando hace su primer dibujo y los demás le alaban, algo dentro de él al fin abre los ojos. Aunque el chico cree que ir a la universidad de Bellas Artes no le va a permitir tener un trabajo para mantenerse y el dibujar es solo un hobbie, decide arriesgarse y unirse al club de Arte, donde tendrá dos años para prepararse y realizar las estrictas pruebas de acceso.

Me gusta mucho cómo nos ponen en contraposición la imagen que tiene la gente de Yatora y cómo es realmente. A simple vista, parece un gamberro que solo sabe salir de fiesta, pero el chico realmente se esfuerza en todo lo que hace, de ahí sus buenas notas. Tiene muchas aspiraciones, pero no sabe lo que realmente le va a reconfortar. Cuando es alabado por su dibujo, la emoción que siente es algo nuevo y fresco que le ayuda a decidirse.

Aunque los padres del chico tienen poco dinero y le dicen que busque una universidad barata, el chico decide esforzarse para conseguir una carta de recomendación y entrar en la privada. Aún no se atreve a decírselo a sus padres, pero no sabe que su madre un día entró en su cuarto y vio los dibujos que tiene, asombrada y dispuesta a apoyar a su hijo.

Dentro de los personajes aparte de Yatora, destacan sobre todo Mori, Yuka y la profesora, cuyo nombre creo que no dicen. Mori tiene un talento innato y está a punto de presentarse a las pruebas, por lo que todos la animan. Yuka, por otro lado, es algo así como la rival de Yatora y la mejor amiga de Mori, siempre con aires de grandeza pero dispuesta a ayudar al chico en su nuevo camino. La profesora de Arte será el último empujón de Yatora, siempre pendiente de las dudas del chico y esforzándose en explicarle todo con paciencia y cariño.

En temas de dibujo, realmente me ha gustado mucho. Viene catalogado como Seinen, aunque también lo veo como un Slice of Life escolar. Tiene personajes con rasgos realistas, sin dejarse llevar por las expresiones exageradas. Me gusta mucho cómo explican la verdadera dificultad del arte, hablando de los estilos, el material, las perspectivas, las técnicas... Todo fácilmente entendible. Yo ya veo que es un mundo realmente increíble.

Y eso os contaré. Es una historia que me ha tocado la fibra sensible por el hecho de que Yatora tiene miedo de que un talento como el suyo no pueda enfocarse al mundo laboral. En cierta manera, es un miedo que comparto desde la perspectiva de la literatura, pero bueno. ¡Ya os contaré más!