¡Buenas tardes, minna!
Regreso con la siguiente entrega de TW+TD, una saga que me gusta cada vez más. Tras el bajón del tomo 3, la historia retome con energía la trama, con un cómic en el que la acción será la protagonista.¡Comenzamos!
Título: The Wicked + The Divine. Tensión dramática
Saga: The Wicked + The Divine #4
Guión: Kieron Gillen
Traducción: Uriel López
Dibujo: Jamie McKelvie
Color: Matthew Wilson
Entintado: Clayton Cowles
Diseño original: Hannah Donovan
Editorial: Norma Editorial
Género: Fantasía / Juvenil
Páginas: 168
ISBN: 978-84-679-3149-5
Precio: 18,00 €
Las maquinaciones de Ananké han llevado a la división entre los dioses de esta generación. Ahora, dos bandos claros se han creado y lo único que queda es el enfrentamiento directo.
De acuerdo, retomemos la historia. Ya que el tercer tomo era más para rellenar información, retrocedamos hasta el final del segundo. Laura, que cree que nunca será una diosa, descubre que es el recipiente de Perséfone, pero Ananké la traiciona y, supuestamente, la asesina. Después se encarga de los padres de la chica y de su hermana, echando la culpa de todo a Baphomet.
Sin embargo, poco a poco se descubre el plan maestro de la diosa eterna. Ha encargado a Woden construir una extraña máquina en la que hay cuatro símbolos: uno de ellos está vacío, pero los otros llevan los emblemas de Lucifer, Inanna y Tara, los cuales dioses que ya han caído. Y, para colmo, Perséfone da su primer concierto, haciendo sonar todas las alarmas del Valhalla.
Cuando Ananké envía a Sakhmet y a Baal a por la chica, estas descubren que está aliada con Baphomet, junto al cual rescata a Morrigan y se llevan a Minerva, que tiene mucha información de Ananké pese a ser solo una niña a punto de cumplir 13 años. El momento de las revelaciones ha llegado y los dioses deberán decidir de qué lado están.
Y esa es más o menos la historia. En el segundo cómic terminamos viendo la muerte de Perséfone/Laura a manos de Ananké, la cual mata después a los padres de la chica e incendia la casa (donde está durmiendo su hermana). Sin embargo, al final del tercer tomo una joven llamada Perséfone llama a un local para dar un concierto, que cambiará todo lo que los dioses creen que está pasando.
Cuando Perséfone entra en acción, Woden está ultimando los detalles de la máquina que Ananké le ha ordenado crear. Esta máquina, la cual el dios no sabe muy bien qué hace, porta los símbolos de los tres dioses caídos y un hueco en blanco. Woden, que no es tonto, sabe que Ananké se cobrará otra víctima más, pero no sabe quién es el objetivo de la anciana.
Una vez que queda claro que Perséfone, la destructora, sigue viva, Ananké envía a Woden y Sakhmet a por ella, pero no es más que una distracción. Mientras ellos luchan, Baphomet se ha infiltrado en el Valhalla, ha rescatado a Morrigan y Minerva se ha unido a su equipo.
A partir de ese momento, toca elegir bandos. Minerva está a punto de cumplir 13 años y es el objetivo de Ananké, la cual se descubre que es la asesina de todos los dioses caídos. Haciendo un acto de fe, Perséfone se reúne con Urdr y le muestra qué pasó realmente: Baphomet no mató a Inanna. Mientras ellos descubren que Ananké les contó a ambos el "secreto" de robar la vida, algo les llama la atención y consiguen salvar a Perséfone. Pero la anciana es más rápida y, antes de que huyan al inframundo, acaba con Inanna, cuyo cuerpo es confundido por el de Perséfone más tarde.
De esta forma, Perséfone y Baphomet planean una forma de salvar a Morrigan y conseguir pruebas para demostrar que Ananké está detrás de todo. Lo que no tienen claro es por qué su guardiana, que debería protegerlos y ayudarlos, está matándoles. Perséfone, aun así, no está dispuesta a perdonarle que asesinara a su familia. Con el poder divino de la destructora, sobrenombre de su deidad, la joven entrará en el Valhalla para detener los planes de la anciana antes de que acabe con Minerva, la única que tiene pruebas para inculpar a Ananké.
Como podéis ver, este tomo tiene muchísima acción. Los poderes de Perséfone, la destructora, son impresionantes, superando al de los demás dioses. Como diosa relacionada como la muerte (por ser la esposa de Hades), es capaz de viajar al inframundo; puede invocar inmensas plantas espectrales, que llegan a alcanzar tamaños colosales; es capaz de entrar en la mente de otros y mostrarles sus pensamientos y recuerdos; y tiene mucha ira contenida.
Al fin se nos muestra qué pasó en la iglesia en la que lucharon Inanna y Baphomet, cuáles son los planes de Ananké y el verdadero nombre de Baphomet, que no es el dios que dice ser. De todos los dioses, creo que solo Sakhmet sigue a su aire. Los demás ya están notando que los están manipulando y están dispuestos a escuchar a Perséfone, a la que creían muerta.
En el otro tomo vimos que había diferentes estilos de dibujo. Me he documentado un poco y al parecer fue idea de los autores, que querían centrarse en terminar otras series y decidieron incluir a artistas invitados para darle ese toque original y más enfocado a la versión de la historia según cada dios. En este tomo ya retomamos el mismo estilo que veíamos en los dos primeros cómics.
Y eso os contaré. La verdad es que este cuarto tomo ha llegado con mucha fuerza y acción, que ayuda a compensar un poco el bajón del anterior. Laura/Perséfone está increíble y sus poderes son épicos. Además, están muy bien dibujados, teniendo escenas de batallas impresionantes. A ver qué nos traen los siguientes tomos. ¡Nos vemos!
Nota: 6/6
Otros títulos:
Buenaas!
ResponderEliminarPues me suena de haberlo visto en algunos sitios y por lo que dices vale la pena ^^
Gracias por la reseña <3
¡Hola, hola!
ResponderEliminarMe encantó esta saga de novelas gráficas. Este recuerdo que me gustó, aunque me pareció algo más flojillo que los anteriores. Creo que mejora mucho más en Fase Imperial, así que espero que lo disfrutes. Los dibujos siempre son magníficos y nunca decepcionan, creo que ese es el mayor punto que le puedo dar. Gracias por la reseña.
¡Un besazo ^^!