Dragon Quest. Los reinos oníricos #1

¡Buenas tardes, minna!

Como ya he comentado alguna vez, soy un gran fan de los videojuegos de Dragon Quest. Ya que han sacado algunos mangas, he decidido darles una oportunidad a ver qué tal se desarrollan. Esta vez vengo con la historia de Los reinos oníricos, uno de los juegos que más me costó superar jajaja. ¡Vamos allá!

Título: Dragon Quest. Los reinos oníricos

Saga: Dragon Quest. Los reinos oníricos #1

Guión: Yuji Horii

Traducción: Irene Tellería y Carlos Alberto Mingo

Colaboración: Aki Tomato

Dibujo: Masaomi Kanzaki

Editorial: Planeta Cómic

Género: Shonen

Páginas: 192

ISBN: 978-84-91733-18-8

Precio: 8,50 €

Un grupo de tres viajeros vuelan a lomos de un dragón hasta el castillo de Maou Mudo. Cuando llegan a la sala del trono, Murdaw los sorprende y acaba con ellos. Botsu, el líder del grupo, despierta en su casa, en el pueblo de Monte Rueca. ¿De verdad fue solamente un sueño?

Botsu es un joven que lleva unos días teniendo extrañas pesadillas. Se acerca el festival de Monte Rueca y el chico tiene que ir a Ganga a por la corona espiritual, un accesorio que llevará su hermana como ofrenda al espíritu de la montaña.

Lo que menos espera es descubrir en un enorme precipicio un castillo de espejismo. Y, para colmo, uno de los personajes de sus pesadillas es real y se trata de un monstruo que está dando problemas al rey de Somnia.

Botsu tendrá que emprender un viaje para descubrir cuál es el objetivo de su vida, dejando atrás a su hermana pequeña y al pueblo que le ha criado desde siempre. Mientras otros elegidos también reciben la señal, el chico comenzará su periplo para ser un héroe.

Y esa es más o menos la historia. El tomo comienza con la pesadilla de Botsu. Él y sus dos compañeros han llegado al castillo de Murdaw, su mayor enemigo. Cuando entran a la sala del trono, el demonio los sorprende y los convierte en piedra, momento en el que el chico despierta. Aunque al principio no le dio importancia, que la pesadilla se repita le empieza a molestar.

Se acerca el festival de Monte Rueca, en el cual un joven actúa como mensajero divino y ofrece la corona espiritual al espíritu de la montaña para que proteja al pueblo. Ya que Tania, la hermana pequeña de Botsu, hará ese año de mensajero, el alcalde ha decidido que Botsu sea el que viaje al pueblo de Ganga, que se encuentra cerca, y recoja la corona de manos del maestro artesano.

Sin embargo, lo que parecía una misión fácil se complica cuando Botsu descubre que Coronio, el artesano, lleva varios días en el bosque sin dar señales de vida. Con su espada siempre a mano, el joven se interna en la foresta, donde encuentra al hombre y a Rubén, su rival de la infancia, siendo atacados por un monstruo.

Durante la refriega, en la que Botsu demuestra unos dotes de espadachín que desconocía, se acerca a un precipicio y ve un misterioso castillo. El retorno a Monte Rueca, sin embargo, le desilusiona, ya que ese castillo es conocido por ser parte de los místicos reinos oníricos, propios de leyendas y de todo menos reales.

De todos modos, la hazaña de Botsu llega a oídos del alcalde, que anima al chico a partir en busca de aventuras. El joven tiene algo especial, esa luz necesaria para ser un héroe, y muchos otros han sentido su despertar a la hora de salvar al artesano. Ahora Botsu deberá dejar su pueblo natal y a su hermana pequeña y partir en busca de los reinos oníricos y las respuestas sobre su pesadilla.

La verdad es que la historia de primeras es un poco absurda. Nuestro protagonista, Botsu, es un chico al que solo se le da bien correr. Aunque le gusta buscar pelea, apenas sabe usar una espada y siempre está discutiendo con Rubén, su rival de la infancia. Sin embargo, cuando salva a este y al artesano, algo despierta en su interior y, por todo el mundo, diferentes personajes ven el augurio sobre la llegada del héroe.

Mientras él comienza su viaje hacia el palacio de Somnia, ya que el rey sabe cosas sobre los reinos oníricos, el demonio Murdaw está ganando poder y su influencia se extiende cada vez más por el reino, volviendo más agresivos a los monstruos y dando muchos problemas al rey. Lo que Botsu no tiene claro es si ese Murdaw tiene relación con el de su pesadilla y si, en ese caso, lo que pasó es real o una visión.

En ese primer tomo tenemos un vistazo del resto del elenco, aunque solo conoceremos más a fondo a tres personajes más. El primero es Arañazos, un limo moteado que es salvado por Botsu y que comienza a seguirle. El otro es Ebaristo, un luchador hecho de puro músculo que conoce a Botsu en Somnia. La tercera es una chica cuya nombre aún no se revela, que vive encerrada y con una maldición de invisibilidad.

En temas de dibujo, nos encontramos con detalles muy similares a otras sagas de Dragon Quest y Dragon Ball. Los personajes tienen diseños muy angulosos, siempre con peinados puntiagudos y equipamiento llamativo. Las peleas están bastante bien dibujadas y los escenarios son llamativos.

Y eso os contaré. Por lo que he visto, esta saga está compuesta de diez tomos, así que me pensaré el intentar completarla. Aunque el juego me gustó, el manga no termina de convencerme, aunque quizá necesite leer un par más para engancharme. Ya veré. ¡Nos vemos!

 

Nota: 5/6