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viernes, 15 de junio de 2018

Pandora Hearts #7

¡Buenas tardes, minna!

Y seguimos con las reseñas de Pandora Hearts. Ahora que terminé del todo la saga de Deadman Wonderland, voy a centrarme en acabar esta, por lo que me iré haciendo de los tomos poco a poco hasta finalizarla.


Título: Pandora Hearts
Saga: Pandora Hearts #7
Guión: Jun Mochizuki
Traducción: Olinda Cordukes
Dibujo: Jun Mochizuki
Editorial: Norma Editorial
Género: Shonen
Páginas: 178
ISBN: 978-84-679-1079-7
Precio: 8 €

Para obtener información de lo que ocurrió hace cien años, Oz y compañía consiguen una audiencia con el duque Barma, de uno de los cuatro grandes ducados. Entonces, entreverán el pasado oculto del payaso tuerto. Para que no le permitan olvidarlo.

Vale, vamos a donde nos quedamos en el final del tomo anterior. Tras infiltrarse en la escuela de Ada para descubrir quién es su enamorado, Oz es secuestrado por los Baskerville, pero Eliot Nightray acude en su ayuda junto a Leo, su sirviente. Cuando parece que van a perder, Jack Vessalius acude al llamado de Charlotte Baskerville, amenazando a la joven y a sus compañeros. 

En ese momento, Oz descubre una terrible verdad: Jack, el héroe que acabó con Glen Baskerville cien años atrás, era el mejor amigo del cabecilla de los malos. Sin embargo, tuvo que acabar con su mejor amigo por el bien de todos. Pensando en ese descubrimiento y en los razonamientos de Eliot Nightray, Oz llega a una resolución: va a empezar a preocuparse por sus amigos y no va a permitir que que carguen con el peso que le pertenece a él.

Para descubrir más sobre lo que aconteció en Sabrie cien años atrás, Oz y sus amigos se citan con el duque Barma, uno de los más antiguos duques de los cuatro grandes ducados. Sin embargo, lo que no esperan es descubrir el secreto que tanto ocultaba Break, una información que podría ser muy valiosa tanto para Pandora como para los Baskerville.

La verdad es que el tomo comienza con el enfrentamiento entre Jack y los Baskerville, donde tenemos un flashback que nos explica cuándo se conocieron el héroe Vessalius y Charlotte. En el pasado, Jack y Glen fueron mejores amigos, pero el destino hizo que ambos tuvieran que enfrentarse. La caída de Glen convirtió a Jack en un héroe para los cuatro ducados, pero él perdió a su mejor amigo.

También tenemos un capítulo intermedio en el que el alcohol y los temas amorosos salen a relucir dentro del grupo. Sharon se lo pasa genial cotilleando y el tío Oscar les emborracha a todos. En esos momentos, la nueva forma de pensar de Oz sale a la luz. Aunque a muchos parece gustarles que el chico decide afrontar la realidad en vez de dejarse llevar, Gil no está tan contento: ese cambio en Oz puede terminar dejándole atrás.

Alice, por su parte, se siente desplazada. Aunque Oz es su "esclavo", está más centrado en todos los demás que en ella. Además, después de salir del laberinto del Gato de Chesire, la chica tiene miedo de recuperar sus recuerdos, ya que estos pueden ser demasiado dolorosos. 

Y al fin las cosas van aclarándose, aunque aún queda para conocer toda la verdad. Con el secreto de Break, el cual no contaré ya que es el final del tomo, he podido crear una hipótesis de por qué Alice se convirtió en una cadena cuando realmente era una chica que fue asesinada durante la catástrofe de Sabrie. También tengo alguna idea de por qué aparecieron Gil y Vincent en la época de Oz, cuando también ellos estaban cien años atrás. 

Y entre todo esto, al parecer Eliot Nightray también tendrá importancia más adelante. Por un lado, la melodía que tocó con el piano y que Oz reconoció fue compuesta por Glen y Jack la introdujo en su reloj, que también era una caja de música. Sin embargo, Eliot afirma haberla compuesto él. También tiene extrañas pesadillas en las que se encuentra en una mansión llena de gente asesinada y él portando una espada bañada en sangre, una imagen muy parecida al recuerdo que encontró Oz en el laberinto del Gato de Chesire.

Como veis, muchas incógnitas sin respuesta pero que ya van dando pie a posibles ideas. En temas de dibujo, el manga sigue el patrón de los tomos anteriores. Cada vez que la historia se centra en un recuerdo o en un hecho del pasado, el borde de las viñetas es negro. También me gusta mucho el diseño de los diálogos, que a veces resaltan más para darles un aspecto menos... "humano".

En general, es un tomo que va dando alguna respuesta, pero sigue trayendo nuevas preguntas consigo. La trama atrapa cada vez más y vemos un hilo que une las historias de todos los personajes, incluso cuando parecen no estar conectados. Oz al fin abre los ojos y acepta sus responsabilidades, aunque aún tiene muchas cosas que solucionar. ¡Nos vemos en la siguiente entrada!


Nota: 6/6


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