Ace of Hearts #1

¡Buenas tardes, minna!

Si os soy sincero, compré este manga porque prometía ser bastante oscurillo. No sabía muy bien de qué iba, salvo que había gente con animales divinos dentro (que no sabía que eran egipcios). Lo cierto es que me ha sorprendido y para bien. ¡Ahora os cuento más!

Título: Ace of Hearts

Saga: Ace of Hearts #1

Guión: Shiru Midoriiro

Traducción: Irene Gutiérrez

Dibujo: Shiru Midoriiro

Editorial: Editorial Shockdom

Género: Shonen

Páginas: 192

ISBN: 9788893362924

Precio: 7,00 €

Cuenta la leyenda que existen personas nacidas con la particularidad de ser animales sagrados. Se parecen y asemejan a los humanos pero cuando menos te lo esperas muestran la bestia que llevan en su interior. Se les han impuesto muchas leyes y restricciones y por ello los llamados "particulares" se esconden en los lugares más recónditos de la tierra.

1910, Venecia: Lian y Noha son dos niños con dos particularidades muy peculiares. Después de haber perdido a sus seres queridos, deciden refugiarse en el internado de Old Mess. Pero una vez dentro, nada es lo que parece. Un escondrijo que parecía acogedor se torna en un lugar lleno de misterios y amenazas, un lugar incluso más peligroso que el mundo exterior...

De acuerdo, comenzamos con la historia. Lian y Noha son dos chicos cuyos caminos se cruzaron cuando estaban solos y perdidos. Ayudándose mutuamente, llegan al orfanato de Old Mess, un lugar que podría suponer la salvación para dos jóvenes especiales como ellos.

Aunque en la institución los reciben sin preguntas, todo se complica cuando Sobek, el animal divino que habita en el cuerpo de Lian, devora el brazo de Vanil, uno de los chicos del orfanato. Este hecho hará que le manden al despacho de Monsieur Kimmer, el director, el cual le sorprenderá y le hará contarle su historia.

En un mundo en el que los animales divinos toman apariencia humana, Lian y Noha han llegado al único lugar seguro para los Particulares, a pesar de que existen cosas siniestras y peligrosas también en el interior de la institución.

Y esa es más o menos la historia. Noha y Lian son dos Particulares, personas que tienen en su interior un animal divino del Antiguo Egipto. Lógicamente, algunas son más peligrosas que otras, como es el caso de Lian, que tiene con él a Sobek, el dios cocodrilo. Aunque ambos han aprendido a vivir en compañía, a veces el dios tiene hambre y toma el control, como en el momento en el que devora el brazo del pobre Vanil.

Lo que en una situación normal sería algo catastrófico, en el orfanato se lo toman como un mero accidente. Enviado al despacho de Monsieur Kimmer, Lian descubre que el director del orfanato acoge en su interior a Ra. Al sentirse protegido por un adulto de su condición, Lian le cuenta su historia, así como el momento en el que conoció a Noha y el porqué de su llegada a Old Mess.

Un hecho que me ha llamado la atención es que, aunque Lian y Noha son los protagonistas, el narrador es Vanil, el chico que pierde el brazo. Él es el que se encarga de ir explicando todo, dándole un toque de humor negro al tener que aprender a escribir con otra mano. También le vemos de adulto, por lo que se entiende que la narración es todo un hecho pasado.

Otro personaje que será importante es Leroi Kimmer, hijo del director y un chico muy interesado en Sobek. Es un joven prepotente, que no duda en burlarse de los profesores y se escapa por las noches. Al igual que su padre, ve fascinante la particularidad de Sobek, incluso después de ser testigo de cómo le arrancó el brazo a Vanil.

A nivel de dibujo, me ha sorprendido ver que lo catalogan como Seinen, aunque imagino que el toque siniestro y ciertos temas pueden encauzarlo de esa manera. De todos modos, prefiero considerarlo Shonen de momento. Ha perdido algunos puntos con el dibujo, ya que muchas escenas están como emborronadas o poco definidas. También tardé un poco en descubrir que los bocadillos negros eran la voz de Sobek y no recuerdos de momentos traumáticos para Lian.

Y eso os contaré. Me ha gustado mucho el rollo de los dioses egipcios, no me lo esperaba cuando compré el manga (después vi el ankh en la portada y todo cobró sentido jajaja). Es una historia que, a pesar de los fallos en el dibujo, promete mucho, así que la seguiré. ¡Nos vemos!

Nota: 4/6